¡Hola de nuevo! Ahora quiero contarte de las aguas revueltas que surqué mientras navegaba por la titánica tarea de cuidar de mi hermanito Benja. Los peligros que me acechaban a la vuelta de la esquina, no tardaron en aparecer en nuestro barco. Sujétate bien porque en el cielo ya se formaron nuevas nubes llenas de aventuras.