Herrera publicó en Madrid la que se considera la más vasta de las historias sobre las Indias: el libro cubre desde el descubrimiento de América hasta el año 1554. Sus fuentes, copiosas y en ocasiones inéditas o desconocidas hoy en día, fueron los relatos de los conquistadores, los misioneros y otros exploradores del Nuevo Mundo. Las Décadas segunda y tercera las dedica a la conquista de México; sin embargo, éstas están basadas única y mayoritariamente en las crónicas ya divulgadas de Díaz del Castillo, Cervantes de Salazar, López de Gómara y Las Casas, un hecho que, en comparación con las otras partes de la obra, les resta mérito. La posición oficial de Herrera en la corte, como Cronista Mayor de Su Majestad, le dio amplio acceso a documentos de uso exclusivo de la Corona. Su juicioso uso de las fuentes le da a su trabajo una objetividad poco común y de gran valía para el investigador interesado en conocer la vida de los españoles e indígenas durante los primeros años del virreinato.
