Cuatro historias, cuatro retratos de esas vidas que transitan una ciudad cualquiera, de gente que es igual a aquella con la que nos cruzamos a diario en nuestro andar apurado y ensimismado. Pero, al mismo tiempo, no son cuatro historias cualesquiera. Son historias de realidad y magia, de sueños imposibles y verdades cotidianas, de trampas del destino y el modo en que pueden ser burladas. De cuánto puede pesar vivir y cómo, a pesar de eso, es posible escaparse.