Nava rasa significa nueve emociones, y son aquellas energías que pueden y suelen afectar nuestros cuerpo, mente y estado de ánimo. Para el Ayurveda, la sabiduría emocional no es más que la capacidad de tomar conciencia de la emoción rápida y hacerla lenta para su observación y análisis, ya que cuando una nos inunda los pensamientos, la respuesta es una reacción inconsciente. Tenemos un programa de observación y una forma de percibir, que es la que determina los acontecimientos percibidos y su acción posterior. La emoción produce varias reacciones, a su vez éstas generan otras tantas que, por su parte, generarán nuevamente otras… y así hasta el infinito. Dicen los Vedas que entendiendo el mecanismo de las emociones se puede lograr un entendimiento y control de ellas por medio de la práctica y disciplina, lo que no significa no emocionarse; si aparece una y se está consciente de ella, se toma distancia, se la observa y no se la alimenta. Luego, la disciplina se hace hábito y uno se convierte en conductor de sus propias emociones.
