Haciendo cambios en el estilo de vida para mejorar su nutrición, bajar los niveles de estrés, los patrones de sueño, y la salud en general, usted puede ralentizar el proceso de envejecimiento y mantener la piel que tenía en su juventud.
Siendo conscientes de su entorno y proteger su piel contra los elementos, usted puede limitar el daño que hacen a su piel. Siendo consciente de problemas potenciales, tales como manchas o forúnculos, usted puede parar las infecciones o afecciones antes de que degeneren en graves problemas.