El programa de Autonomía Personal mantiene la atención a 430 personas mayores en una continua adaptación de su actividad a la situación sanitaria

Acercar Disminuir el zoom Imprimir

El programa municipal de Promoción de la Autonomía en Personas Mayores ha despedido el año 2020 con un total de 430 personas usuarias en la ciudad y el esfuerzo realizado por el equipo de trabajadores que las atienden para adaptar su trabajo y forma de relacionarse con los mayores a la situación sanitaria.

 “Sabemos que no está siendo fácil, hemos tenido que suspender actividades de un día para otro y hacer varias adaptaciones en la planificación en un solo mes, por eso es de valorar el esfuerzo de los trabajadores y trabajadoras de este servicio, que se sobreponen al desánimo que pueden sentir en ocasiones todo para atender a las personas mayores ”, ha valorado la concejala de Atención a las Personas, Juani García, para quien este programa es clave en el Plan Municipal de Mayores que queremos aprobar en este año 2021 para prevenir la soledad no deseada, entre otros objetivos.

 Este programa de Promoción de la Autonomía en Personas Mayores diversifica su actividad en varios lugares, por un lado, actúa directamente en los domicilios de los mayores; también desarrolla parte de su actividad en centros socioculturales y al aire libre y, por último, cuenta con un centro propio que ahora se ubica en la calle Batalla del Salado, pero que se trasladará a un nuevo edificio que se está construyendo en la calle Lepanto .

 Si hay un colectivo que ha sufrido en esta pandemia han sido las personas mayores, quienes pese a su vulnerabilidad y ser los afectados por el Covid-19, han demostrado una gran fortaleza, “acostumbrado a saber defenderse ya demostrarnos su capacidad para adaptarse ya saber transmitirnos su saber ”, exponen los profesionales que atienden este programa.

 En marzo, cuando se decretó el Estado de Alarma y toda la población se tuvo que confinar, el programa no se suspendió, sino que se adaptó a la nueva situación, encontrando nuevas formas de relacionarse con los y las usuarias del centro y así poder seguir promocionando sus capacidades y autonomía. Al tercer día del confinamiento, ya se puso en marcha un seguimiento telefónico para saber en qué situación se encuentran cada persona mayor usuarios del programa y ofreciendo recursos a quienes no tenían apoyo familiar: desde comida a domicilio, pasando por servicio de teleasistencia o servicio de ayuda a domicilio. El empeño era que el contacto no se perdiera.

 ACTIVIDAD PRESENCIAL Y SEGUIMIENTO TELEFÓNICO

En junio se retomaron las actividades presenciales, aplicando un riguroso plan de prevención de riesgos sanitarios de profesionales y personas usuarias. Afortunadamente, ninguna persona de las que asisten a este programa ha sido víctima de la Covi-19, si bien han sufrido los fallecimientos de familiares cercanos.

 Desde junio hasta ahora, la actividad se mantiene en continua adaptación, de acuerdo a las circunstancias sanitarias. Así, en estos momentos, al estar la ciudad en Nivel 3, ha sido necesario suspender el programa de transporte, las actividades terapéuticas y rehabilitadoras se realizan en grupos de 2 personas del mismo grupo familiar en el centro y en los barrios se mantiene cuando es posible actividad al aire libre en grupos de 6 personas. Esta actividad presencial en grupos reducidos y la atención telefónica, han posibilitado que de una u otra manera, se lleven a cabo las distintas acciones que se realizan.

 El programa de Promoción de la Autonomía cuenta con profesionales de la Psicología, Trabajo Social, Fisioterapeutas y Terapeutas Ocupacionales, para llevar a cabo un cabo un cabo un cabo un cabo su actividad.

 El contacto con las personas mayores permite hacer un seguimiento de los casos de soledad no deseada, personas con enfermedades crónicas o deterioro cognitivo, en situación de riesgo o sobrecarga familiar. Desde el servicio de atención psicológica se ha ofrecido a las personas usuarias recomendaciones para afrontar la cuarentena, cuando ha sido necesario se ha acompañado en la elaboración del duelo por la pérdida de familiares a causa de la Covid-19; a quienescen como cuidadores de personas con deterioro cognitivo se les han ofrecido pautas para evitar el avance de este deterioro y se ha ofrecido apoyo psicológico a personas vulnerables al estrés emocional que se ha visto agravado entre las personas mayores durante el confinamiento.

 La terapia física se realiza mediante los servicios de Fisioterapia y Terapia ocupacional. El Centro de Autonomía de la calle Batalla del Salado ofrece servicio de fisioterapia con tratamientos de electroterapia, termoterapia y ejercicio físico con mecanoterapia y cinesiterapia, que ha tenido que adaptarse reduciendo los grupos. Los terapeutas ocupacionales se centran, sobre todo, en estimular la memoria para prevenir su deterioro; además se realiza una estimulación cognitiva a través de plataformas informáticas.

 EN LOS BARRIOS

 En los barrios, se ofrece la actividad de gerontogimnasia y entrenamiento cognitivo, que también ha debido reducir los grupos y adaptar sus sesiones a esta nueva situación. Actualmente, se realiza esta actividad en los centros sociales de La Pajarita, Feria, Industria, El Pilar, San Pablo, Ensanche, Parque Sur y Hospital.

 Para las personas que por miedo a la Covid-19, o por otras circunstancias, no se han podido incorporar a las actividades presenciales se ha puesto en marcha una intervención domiciliaria, en personas que han iniciado procesos de deterioro físico, funcional, cognitivo y emocional y que necesitan este apoyo. Asimismo, a través del teléfono se ofrece un acompañamiento que ofrece apoyo a situaciones de duelo, pautas de activación de conducta, hábitos saludables y afrontamiento del estrés. A estos usuarios se les facilitan unos cuadernillos con actividades físicas y de entrenamiento cognitivo, que les permiten mantenerse activos.