Hoy, día del Pilar, patrona de la Guardia Civil, celebramos nuestra fiesta nacional, aunque, por motivos de precaución ante el riesgo del Covid-19, hemos tenido que renunciar a un acto público tan entrañable y querido por toda la ciudadanía como es compartir con oficiales, suboficiales, cabos y guardias civiles en las ciudades y pueblos de toda España este día de fiesta.
Afecto y admiración a la Guardia Civil
No quiero dejar pasar la ocasión, como delegado del Gobierno de España en
Castilla-La Mancha, para felicitarla en esta fecha tan señalada y agradecer
públicamente la protección y seguridad prestada a los ciudadanos de la región y
el amparo que ofrece al ejercicio de nuestros
derechos y libertades.
El honor, como máxima divisa del Cuerpo desde la fecha de su creación, es
un valor inestimable, como su carácter benemérito, y es por esta razón que los
hombres y mujeres que a él pertenecen, prestándose a un servicio tan abnegado como
exigente, son dignos de nuestro afecto y admiración.
Durante estos ocho meses desde que se inició la pandemia, la Guardia
Civil ha contribuido de forma ejemplar en nuestro mundo rural a informar,
proteger y garantizar el cumplimiento de todas aquellas medidas aprobadas por
las autoridades sanitarias en beneficio de la ciudadanía.
En esta crisis sanitaria, una vez más la versatilidad de la Guardia Civil
ha dado en el desempeño de sus funciones, ejemplo de profesionalidad, y espíritu
de servicio, valores que la acreditan como una de las instituciones más respetadas
en el seno de la sociedad española.
La seguridad ciudadana es un bien público que el Estado debe garantizar asignando a las Fuerzas y Cuerpos de
Seguridad capacidades, recursos, formación y unas condiciones laborales y
retributivas dignas para el correcto desempeño de sus funciones.
Del mismo modo, el Estado también debe ser capaz de ofrecer constante
especialización a sus efectivos para hacer frente de forma eficaz a los nuevos
restos que nos plantea las seguridad del siglo XXI, como son la
ciberdelicuencia, la protección del medio ambiente o las nuevas formas delictivas
de odio y dominación hacia los colectivos más vulnerables.
Respecto a los recursos humanos y materiales el compromiso de este
Gobierno es firme. Hemos realizado la oferta pública de empleo más ambiciosa de
las acometidas hasta ahora en la Guardia Civil, convocando en estos tres
últimos años 6.429 plazas; la inversión en infraestructuras hasta el año 2025 contará con una a dotación
de 600 millones de euros y seguimos avanzando en el acuerdo alcanzado para la equiparación salarial de
la Guardia Civil con otros cuerpos de policía autonómicos.
La Guardia Civil, como Cuerpo de Seguridad del Estado que dispone del
mayor número de efectivos desplegados en España, está llamada a desempeñar un
papel fundamental por su valor vertebrador
del territorio nacional, en el “Modelo de Seguridad 2030” y en sus dos objetivos fundamentales: mantener la capacidad
de reacción frente al delito y avanzar sobre la cultura de la prevención desde el
principio fundamental de la cooperación institucional con comunidades autónomas, ayuntamientos y sociedad civil.
Por esta razón vamos a apostar por un aumento de los efectivos en materia
de prevención e investigación en el medio rural, reforzando a los equipos ROCA,
que, desde su creación en el 2013, han dado prueba de su efectividad y de su
estrecha relación con los habitantes de nuestros pueblos, lo que es un motivo
más de orgullo para la Guardia Civil y de reconocimiento por la
ciudadanía.
Enmarcado en este papel vertebrador del territorio, el reto demográfico
se va a incorporar al nuevo Modelo
de Seguridad, donde la Guardia Civil tiene una labor
fundamental porque, al igual que otros servicios públicos que contribuyen a
fijar la población, la seguridad encarna un valor esencial para la convivencia
y para el progreso social y económico en nuestro medio rural.
Por último, quiero subrayar que es un momento también para tener un
recuerdo, con respeto y afecto, para todos aquellos que durante el último año
nos han abandonado, para expresar a sus familias y amigos nuestra solidaridad por
su pérdida.
Un año más, gracias a la Guardia Civil, por contribuir a garantizar
nuestra convivencia, nuestros derechos y libertades y por su vocación abnegada
y fiel de servicio público.
Francisco Tierraseca Galdón.
Delegado del Gobierno de España en Castilla-La Mancha.