Desde la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos de Castilla-La Mancha se ha denunciado en fechas recientes los primeros precios de las tablillas presentados por algunos industriales, unos precios que no cubren ni los costes de producción y que han motivado, entre otras razones, la suspensión de la vendimia en Valdepeñas.
UPA-CLM con los viticultores de Valdepeñas
El secretario general de UPA
Castilla-La Mancha, Julián Morcillo, afirma que después del esfuerzo y
sacrificio de un año como el actual, donde ya se han acometido los gastos, que
los viticultores se vean en la tesitura de parar la vendimia, “con lo que ello
puede suponer no solo en la economía de sus explotaciones, sino de toda la
comarca”, debido a los precios que se han presentado en las tablillas, no les
queda otra opción “porque estos precios les conducirían a la ruina”.
Apenas iniciada la vendimia 2020,
y lo primero que se han encontrado los viticultores son precios por debajo de
los costes de producción, precios de hace más de treinta años, que han movilizado
a un sector vapuleado año a año por los comportamientos de ciertos industriales
que aprovechan el carácter perecedero del producto para presionar al eslabón
más débil de la cadena: el viticultor profesional.
“Desde UPA Castilla-La Mancha no
podemos compartir estos precios en Valdepeñas”, han afirmado, a pesar de la
situación del vino a nivel mundial, europeo y nacional. “Creemos que en
Valdepeñas se dan las condiciones de que sea una excepción, porque la situación
es otra”. De hecho en principio las ventas han ido bien, las industrias han
ganado porque sus ventas están centradas en el canal de supermercados, tal y
como ha afirmado la Mesa de Productores de la DO Valdepeñas; e incluso los
propios industriales llegaron a solicitar un incremento de rendimientos de las
producciones amparadas en la DO, en previsión de las buenas perspectivas de
mercado.
Por eso, desde UPA no se entiende
este descenso desproporcionado en los precios. “Mostramos todo nuestro apoyo a
los viticultores de Valdepeñas y solicitamos un esfuerzo a los industriales de
la DO para que pongan unos precios acorde a la situación”, ha recordado
Morcillo. Porque desde la organización agraria consideran que la situación aún es
reversible. “Eso sí, si esto no se arregla, el lunes a las doce nos reunimos en
Madrid con la directora de la AICA” donde se debatirán todas estas cuestiones
y, si no se garantizan los costes de producción, “se iniciarán las acciones
oportunas para garantizarlo”.
“Está claro que defendemos la
postura del más débil, pero es una postura de obtener precios dignos por el
trabajo que desempeñamos los agricultores de explotaciones familiares”, afirman
desde UPA.