La organización agraria se concentrará el día 16 en Madrid, frente al MAPA, y el día 17 en Toledo, en la sede provisional de la Delegación del Gobierno en Castilla-La Mancha. Estas son las primeras acciones de un movimiento reivindicativo en defensa del sector agropecuario que vuelve a salir a la calle para hacerse oír.

 La Asociación Agraria-Jóvenes Agricultores (ASAJA) de Ciudad Real ha hecho un llamamiento a los agricultores y ganaderos de la provincia para que se unan al nuevo movimiento de protestas que retoma la organización agraria. El pistoletazo de salida será el próximo lunes, 16 de diciembre, en Madrid ante la sede del ministerio de Agricultura; para continuar el martes, 17 de diciembre en Toledo ante la sede provisional de la Delegación del Gobierno en Castilla-La Mancha. “Empezamos el año con manifestaciones y terminamos igual, con actos de protesta para expresar el malestar del sector por la falta de respuestas a muchos de los problemas que acumulan los profesionales del campo”, ha lamentado Florencio Rodríguez, secretario general de ASAJA Ciudad Real.

 “El tiempo nos da la razón y el paquete de medidas del Ministerio de Agricultura ha sido claramente insuficiente para dar solución a las demandas del sector”, ha recordado Rodríguez. “La mayor parte de aquellas reivindicaciones siguen más vivas que nunca, como los altos costes de producción, para lo que desde Castilla-La Mancha estamos exigiendo la creación de un observatorio de costes como herramienta esencial para la negociación de precios justos y que pueda proteger a los agricultores y ganaderos frente a los abusos”. Al mismo tiempo, la organización agraria reclama mayor vigilancia en el cumplimiento de la Ley de la Cadena Alimentaria y en la necesidad de reformar el sistema de seguros agrarios, “ya que no cumple con su objetivo principal, que es proteger la renta de los profesionales del campo frente a las adversidades meteorológicas y las enfermedades animales”.

 “A principios de año ya exigíamos seguridad alimentaria y control rigurosos de las importaciones, además de aranceles disuasorios para proteger el mercado interno y evitar el hundimiento de los precios nacionales, especialmente en las importaciones masivas de cereales. También fueron bandera de nuestras reivindicaciones la transparencia en el etiquetado y las cláusulas espejo en los acuerdos comerciales, que hoy vuelven a estar de rabiosa actualidad tras la aprobación del acuerdo con Mercosur”.

En relación a éste, el secretario general ha aclarado que “ASAJA no está en contra del comercio”, pero ha asegurado que “Mercosur es una amenaza para nuestro modelo agrícola porque no existe reciprocidad en las exigencias de producción. Supone un atentado contra el campo español y un claro ejemplo de competencia desleal porque, mientras a los productores europeos nos imponen producir con unas enormes exigencias medioambientales, de calidad, de sanidad y bienestar animal; por otro lado, cierran tratados comerciales con terceros países que importan sin ninguna de esas imposiciones”.

 Entre las reivindicaciones con las que ASAJA saldrá a la calle no podían faltar las relacionadas con el agua; tema primordial para el sector agrario de la provincia de Ciudad Real. En este punto, Rodríguez ha asegurado que “la falta de inversiones e infraestructuras, así como una política hidráulica decidida que vertebre nuestro país, sigue siendo una materia pendiente y vital para el futuro de nuestro sector”. El secretario general ha explicado que “saldremos a la calle para exigir un replanteamiento de las Confederaciones Hidrográficas, porque lo que está sucediendo en el Alto Guadiana no tiene parangón. Expedientes en un cajón durante años sin resolver, gestionando a golpe de restricciones y sanciones”, ha dicho. El secretario general ha exigido “rigor científico” sobre los datos de disponibilidad de agua y “discriminación positiva para el acceso de los jóvenes a este recurso, como medida esencial para asegurar el relevo generacional del campo”.

Por último, ha destacado la importancia de “que se simplifique la carga administrativa porque mientras estamos en la oficina no podemos estar en el campo produciendo. Solo pedimos que nos dejen trabajar”. En este sentido, Rodríguez ha señalado que entre las reivindicaciones está la petición de que reduzcan los trámites, los tiempos burocráticos, y la complejidad normativa, ajustándola a la realidad del campo, evitando imposiciones que generen pérdidas, despoblación y pongan en riesgo la soberanía alimentaria”.

“Esto no ha hecho nada más que empezar”, ha sentenciado Rodríguez. Desde ASAJA ya se trabaja en el calendario de movilizaciones que se desarrollarán a partir de enero de 2025 en las que “no se descartan tractoradas y protestas masivas”. El secretario general ha insistido en que “lo importante es la unidad del sector, para hacernos oír”.