UGT CLM forma a sus delegados y delegadas en salud laboral en el sector agrario. Desde el sindicato analizan la situación de la siniestralidad laboral en el campo, así como la llegada de la agricultura inteligente o la baja presencia de las mujeres en el sector
El envejecimiento de la maquinaria agrícola, la falta de evaluación de los equipos de trabajo y la alta edad de los trabajadores son las principales causas de accidentes laborales en el campo en CLM




UGT CLM ha organizado el taller “Vuelco
de tractores en el sector agrario” en Manzanares, Ciudad Real, para formar a
sus delegados y delegadas en salud laboral en el sector. Un curso enmarcado en
el Acuerdo Estratégico de Prevención de Riesgos Laborales 2022-2026 de
Castilla-La Mancha. En la jornada se ha expuesto la situación del sector en la
región, en el ámbito de la seguridad laboral.
De enero a agosto de 2023 según datos
del Ministerio de trabajo en CLM se han registrado 1.463 accidentes laborales
en el sector agrario. Situándose como uno de los sectores con mayor
siniestralidad.
Según el análisis expuesto por el
sindicato, y recogido por los técnicos de prevención, la mayoría de las
empresas carecen de procedimientos para la elección de puestos de trabajo, y no
se evalúan de manera específica y concreta los riesgos para la salud de los
trabajadores/as derivados de la utilización de dichos equipos. Además, las
planificaciones preventivas aparecen mayoritariamente incompletas. También se
observa la existencia y utilización generalizada de equipos de trabajo que
carecen de marcado CE y declaración de conformidad CE.
Otro de los asuntos analizados ha sido
el envejecimiento de la maquinaria agrícola. Según el registro de maquinaria de
CLM, en la región hay 32.185 tractores con más de 40 años. Unos datos
preocupantes, por las consecuencias que esto conlleva. También se ha expuesto
la situación que se está dando con la llegada de la llamada “agricultura
inteligente”, la digitalización de los procesos mecánicos agrícolas está
suponiendo una mejora en la productividad, pero también tiene consecuencias
negativas, como la disminución de los empleos (sustituidos por máquinas), el
debilitamiento de algunas habilidades, así como la contaminación ambiental.
Otro de los temas que se han abordado,
ha sido el de la presencia de la mujer en el sector.
Según datos de la EPA el porcentaje de
mujeres trabajadoras en el conjunto del sector agrario en CLM es del 23 %
frente al 77 % de los hombres. Las diferencias se acentúan por actividades
dentro del sector: En el sector agrario y ganadero ocupan el 24 %, y en
silvicultura, por ejemplo, el 11 %.
En cuanto a daños derivados del
trabajo, las mujeres del sector presentan mayor incidencia en enfermedades
profesionales especialmente en trastornos musculoesqueléticos y son colectivo
prioritario de actuación por su siniestralidad
Se observa una segregación de tareas en el sector agrario: la mujer se dedica
en gran medida a tareas manuales, no mecanizadas que son generalmente las menos
cualificadas.
En este contexto, para UGT CLM es fundamental garantizar la igualdad de
oportunidades entre hombres y mujeres en el sector desde el conocimiento y
aceptación de las diferencias biológicas sin convertirlas en desigualdades
sociales.