El Centro Alfarero La Estación, fue la antigua estación de tren de Argamasilla de Calatrava, y hoy, años más tarde, es un centro cultural de primer orden, lleno de claridad y sosiego, de nostalgia y encanto. Para la alfarera Graci Arias, ‘La Estación’ “es un lugar mágico, que antaño fue lugar de encuentros, reencuentros, desencuentros y hoy los encuentros son con el arte, con la música y con la poesía”. Destacable la gran labor de esta familia de alfareros, ceramistas y artistas formada por Ángel Leal, Graci Arias, Rosa Leal y Gracia Leal.
‘La Estación’ de Argamasilla de Calatrava, acogió un tren de poetas que llenó los andenes de versos y música




Las estaciones marcan siempre un final y un comienzo, también una continuidad. En ellas nos impregnamos de recuerdos y añoranzas, ¿quién no ha tenido un hola o un adiós en alguna de ellas?, son una metáfora de nuestra propia existencia, llena de tristezas y alegrías; sueños y fantasías, amores y retos, agradecimientos y nostalgias, esperas y despedidas. Vivencias y experiencias que nos acompañan de manera indeleble en nuestro viaje por la vida.
El
pasado 29 de abril, el Centro Alfarero ‘La Estación’, abrió sus puertas para
acoger a unos viajeros de la vida muy especiales, poetas llegados de toda la
geografía ciudadrealeña, que bajo los susurros de las hojas de los árboles de
la estación y arropados por los acordes de la música del piano de Gracia Leal,
vertieron al aire ‘Palabras de muerte y libertad’, versos de paz,
armonía y amor inundaron el mágico lugar de la estación de tren de Argamasilla
de Calatrava.
Si
en el pasado ‘La Estación’ fue fuente de vida y de riqueza para Argamasilla de
Calatrava, hoy es fuente de Cultura con mayúsculas. Al igual que en la vida, lo
importante no es que pase el tren, sino que pare y en esta estación paran
trenes llenos de cultura, gente que va y viene y que traen y llevan y a ella,
coordinados por el poeta Luis Díaz-Cacho Campillo, llegaron los rapsodas,
Alfredo Jesús Sánchez Rodríguez, Antonia Piqueras Jiménez, Diana Rodrigo Ruiz,
Eloísa Pardo Castro, Eusebio Loro, Francisco Jesús López Sánchez, Javier
Márquez, Juan Camacho, Juan José Guardia Polaino, Luis Díaz-Cacho Campillo,
Luis Romero de Ávila Prieto, Nieves Fernández, Ramón Aguirre y Teresa Sánchez
Laguna, además de los poetas invitados Marciano Sánchez y José González Ortiz.
Una
velada que se extendió hasta bien entrada la noche, donde los viajeros de la
poesía, compartieron sus bebidas y viandas, con los demás viajeros de la
estación, también sus inquietudes y esperanzas, sus logros y afanes. Todos
disfrutaron de todos y también del arte de Rosa Leal, con la exposición de las
obras que inundan los libros “Palabras a la muerte” y “Palabras a la libertad”.
El
adiós fue dulce y el regalo de los alfareros en forma de vaso de barro para
brindar por el próximo encuentro, por el próximo tren que vuelva a parar en La
Estación de Argamasilla de Calatrava. Y como en todos los viajes, la
importancia de los agradecimientos, el de Graci Arias al ayuntamiento rabanero,
a los poetas y al Grupo Oretania; el de todos a esos alfareros que son ‘poetas
del barro’, ahora ‘Jefes de estación’ y el agradecimiento del Consistorio, en
la persona de la edil Ana Belén Sáez, por una tarde inolvidable.