UNICEF ha llegado hasta el momento a 277.000 personas con suministros vitales, de los que 163.000 son niños y niñas, y a 198.000 personas con ayuda psicológica.
2,5 millones de niños y niñas en Turquía necesitan ayuda humanitaria urgente tras el terremoto




La directora ejecutiva de UNICEF, Catherine Russell, concluyó hoy una
visita de dos días a Turquía en la que conoció a niños, niñas y familias
afectadas por los poderosos terremotos que azotaron el sureste de
Turquía y el norte de Siria a principios de este
mes de febrero.
Russell
destacó la importancia de los servicios sociales, incluidos el agua y
el saneamiento, y el apoyo psicosocial
para los niños y niñas afectados. Visitó un espacio amigo de la
infancia apoyado por UNICEF en Gaziantep, donde los niños y sus padres
reciben apoyo y asesoramiento sobre salud mental para ayudarlos a sanar y
recuperarse. Russell también se reunió con familias
en Kahramanmaraş, incluidas familias de refugiados sirios, y vio el
centro de alojamiento temporal que actualmente alberga a 17.000
personas, casi un tercio de ellos niños y niñas.
“Los
terremotos fueron un evento absolutamente catastrófico para los niños y
niñas de las comunidades afectadas
(…) Al caminar, ves fragmentos de la vida cotidiana de las familias,
como congelados en el tiempo. En medio de un nivel inimaginable de
destrucción, edificio tras edificio reducido a escombros, verás una
manta, un juguete o un libro infantil: restos de vidas
jóvenes violentamente truncadas o interrumpidas”.
Trabajando
en estrecha colaboración con el Gobierno turco, incluida la Presidencia
de Gestión de Desastres y Emergencias
del Ministerio del Interior (AFAD) y la Presidencia de Gestión de la
Migración (PMM), UNICEF ha estado prestando apoyo psicosocial a los
niños y las familias afectadas, estableciendo escuelas temporales,
identificando a los niños y niñas separados y no acompañados
-así como reuniéndolos con sus familias o cuidadores-, evaluando los
daños en las estaciones y servicios de agua, y valorando las necesidades
de salud y nutrición de los damnificados.
En
las áreas afectadas por el terremoto de Turquía, un total de 2,5
millones de niños y niñas necesitan ayuda humanitaria
urgente. UNICEF ha llegado hasta ahora a casi 277.000 personas,
incluidos más de 163.000 niños y niñas, con suministros vitales,
incluidos kits de higiene, ropa de invierno, estufas eléctricas y
mantas. En colaboración con sus aliados, UNICEF ha prestado a
más de 198.000 personas primeros auxilios a nivel psicológico y
actividades recreativas en las zonas damnificadas y otras ciudades.
En
el campamento de Kahramanmaraş, Russell habló con una madre de 28 años
con cuatro hijos que "pensó que era el
fin del mundo" cuando se despertó durante el primer terremoto. “Me
contó que escuchó gritos y gritos, y luego oscuridad (…) Está agradecida
de que todos hayan sobrevivido, pero cree que las heridas emocionales
de sus hijos tardarán mucho en sanar por completo.
Por eso, dar apoyo psicosocial a los niños y niñas afectados es tan
críticamente importante”, ha añadido Russell.
Los
terremotos y miles de réplicas han trastocado la vida de millones de
niños y niñas y ha dejado a muchos con
miedo, confundidos y con una necesidad desesperada de apoyo
psicosocial. Russell se unió a un grupo de niños y niñas en un espacio
amigo de la infancia que recibe apoyo de UNICEF, donde los niños
hicieron dibujos de lugares que les trajeron buenos recuerdos
y pensamientos. “Me siento mejor después de escuchar que los otros
niños y niñas se sienten bien”, le contó a Russell Yagmur, una niña de 8
años.
“La
destrucción física que trajo este terremoto es clara para todos y
todas, pero el coste emocional menos visible
en los niños y niñas es igual de profundo (…) Por eso el apoyo
psicosocial juega un papel fundamental para ayudar a los niños y niñas a
sanar y que las familias reconstruyan sus vidas. Al darles a los niños
un espacio seguro para expresar sus sentimientos,
conectarse con otros y reconstruir su sentido de seguridad, podemos
ayudarlos a sanar y recuperarse”, ha agregado.
UNICEF
también está trabajando para garantizar que los niños y niñas puedan
volver a aprender lo antes posible.
La organización está evaluando los daños a las escuelas y preparándose
para hacer reparaciones inmediatas y establecer escuelas temporales.
En
Turquía, UNICEF solicita 196 millones de dólares (184,6 millones de
euros) para beneficiar a 3 millones de personas,
incluidos 1,5 millones de niños y niñas, con suministros esenciales;
agua, saneamiento e higiene; salud y nutrición; protección infantil;
educación; y apoyo humanitario en efectivo a niños vulnerables.