Los datos del Índice de Precios al Consumo (IPC) conocidos hoy miércoles vuelven a poner a Castilla-La Mancha como la comunidad autónoma más inflacionista, una región donde más se castiga a las familias trabajadoras que deben afrontar una escalada de precios inédita con salarios especialmente bajos. El IPC subió en junio un 2,4% respecto a mayo (la mayor subida mensual de 2022), y es un 12,7% superior al de hace un año, el peor dato de todo el país, donde el IPC crece un 10,2%.
Un mes más Castilla-La Mancha es la región más inflacionista y los salarios están muy lejos de crecer al mismo ritmo
En CLM como en toda España lo que refleja la
encuesta de precios es que no hay freno
a la escalada de coste para lo que tiene que ver con alimentos, energía y
transporte. Sólo en junio y en Castilla-La Mancha el IPC de la alimentación
crece un 2,9%, y un 15,2% en los últimos 12 meses.
Parecido ocurre con la electricidad, gas y
otros combustibles, con un IPC que sube un 8,8% de mayo a junio, y crece un
52,6% en un año, en la comunidad autónoma castellano-manchega. Aumentan a su
vez los costes asociados al uso de vehículos particulares, con un IPC
interanual del 25,6% para el caso de las personas que viven en la región.
Para Nunzia Castelli, secretaria de Acción
Sindical en Comisiones Obreras Castilla-La Mancha, los datos son especialmente
graves por cuanto confirman que el castigo al poder adquisitivo de la gente
trabajadora es doble para quienes viven en esta región, “con una subida de
precios aun mayor, y con salarios más bajos que la media”. Con esta dinámica,
empeorará el dato ya negativo que dice que un 44,6% de la
población de Castilla-La Mancha con dificultades para llegar a fin de mes.
El sindicato sigue reclamando medidas eficaces para contener los precios,
“dado que las adoptadas no son suficientes, a la vista de lo que muestra la
encuesta del IPC cada mes”, ha apuntado Castelli. Es precio a su vez “que las
empresas entiendan de una vez que han de mejorar el sueldo de sus plantillas,
hay que llevar a los convenios subidas salariales suficientes como venimos
reclamando”.
La necesidad de ese incremento salarial se
reafirma además en el dato conocido esta semana acerca de las causas del
incremento de los precios, recuerda la responsable regional de Acción Sindical
de CCOO CLM: Ya en el cuarto trimestre de 2021 los beneficios empresariales
fueron responsables del 106,3% del aumento de los precios, y en el primer
trimestre de este año del 83,4%, un dato objetivo que nadie puede olvidar”.
Son cifras que figuran en un informe del
Gabinete Económico de CCOO donde se constata además que en España los márgenes
de beneficio han tomado un camino distinto al de otros países, comenta
Castelli: “Es un hecho que los márgenes de beneficio de las empresas
energéticas suben un 60% en España, cuando en la Eurozona crecen un 46,5%, y
pasa parecido con las financieras, cuyo margen de beneficios por servicio
financiero prestado ha subido un 25,7% en el último año, cuando en la Eurozona
se recortó un 0,6%”.
La realidad es que, conociendo estos datos y
los que ofrece hoy el IPC, es oportuno que el Gobierno tome nuevas medidas para
gravar esos beneficios, ha dicho Castelli, que subraya la propuesta de CCOO el
Ejecutivo establezca precios máximos sobre bienes y servicios básicos,
“revisables cuatrimestralmente”, con los que corregir el aprovechamiento que
algunas empresas están haciendo de la actual coyuntura de incertidumbre. “Es
posible poner precios máximos que garanticen la sostenibilidad económica de las
empresas que los apliquen, y tengan un margen de beneficio razonable”.