Esta recopilación de capítulos sobre el desarrollo comunicativo, del lenguaje y de la literatura para los menores de cinco años describe pautas generales y consejos que pueden ayudar a las familias a comprender el desarrollo de sus hijos. Hemos pretendido dar respuestas científicamente fundamentadas a algunas de las preguntas que las familias tienen sobre este desarrollo. Comenzamos exponiendo brevemente cómo es el desarrollo lingüístico y comunicativo de los bebés desde el balbuceo hasta las primeras palabras. Explicamos los logros evolutivos ligados al funcionamiento comunicativo de los niños y resaltamos pequeñas señales a las que prestar atención si aquellos no se alcanzan. Junto a estas, ofrecemos pautas que favorecen la estimulación temprana y la alimentación, ya que esta fisiología es compartida con la del lenguaje. Explicamos qué se entiende por ser bilingüe, lo relativo a educación bilingüe y que ni el desarrollo intelectual ni el desarrollo académico de los niños se ven afectados por estar expuestos a más de una lengua. Advertimos de las expectativas que tenemos los adultos sobre el propio desarrollo del lenguaje infantil y cómo estas pueden influir en el desarrollo lingüístico diferenciado de los niños y las niñas.
Reflexionamos sobre lo importante que es el tiempo que pasamos con los bebés para ayudarles a desarrollar sus emociones e incentivar sus capacidades comunicativas y lingüísticas, para lo cual la música es fundamental. Y la música como forma de habla, el canto. Las canciones infantiles juegan un papel crucial en su desarrollo socioemocional y comunicativo. Una forma de música es la poesía, por lo que ofrecemos trucos para disfrutar compartiendo poesía y también sacar partido a ciertas situaciones incómodas gracias a este género. La poesía es una de las primeras formas de lectura y la lectura conjunta en esta primera etapa de la vida significa momento de encuentro entre adultos y niños. Por eso, ofrecemos consejos sobre cómo contar cuentos a los más pequeños, como una forma de juego que capte su atención. Los niños saben extraer sus propias conclusiones de los cuentos y comprender su valor simbólico, lo que les ayuda a comprender mejor la realidad que los rodea. La biblioteca será un lugar de encuentro que desescolariza la lectura y les enseña el valor real de compartir. En definitiva, la música, la poesía, la lectura compartida son formas de estrechar vínculos, de que los bebés se sientan queridos, cercanos y atendidos.
Con la lectura de este libro pretendemos enseñar a los adultos a ser pacientes durante el desarrollo del lenguaje, ya que todos los niños deben alcanzar distintos hitos en su desarrollo y cada uno de ellos los irá consiguiendo a su ritmo. A ser observadores de este desarrollo y si vemos algo que nos llame la atención consultemos con los especialistas. A ser flexibles con las expectativas que tenemos de los más pequeños. A ser participantes activos potenciando sus capacidades, siempre prestándoles atención, desde las palabras, las historias, los juegos, las canciones, la música y la literatura. Y esperamos que también traiga beneficios para los pequeños, como ofrecerles el mundo a su alcance. Podemos acercarles la literatura y convertirlos en pequeños lectores de poesía, de cuentos tradicionales o de versiones nuevas y modernas desde que tienen unos meses de vida, y también podemos ofrecerles un mundo rico en sonidos, texturas y sabores. Y, además, todo esto lo deberíamos poder hacer sin crear espacios mentales diferenciados para niños y niñas. Lo único que importa es la diversión y el vínculo con los bebés y niños pequeños, para lo que hay que dedicarles tiempo y atención y, sobre todo, mucho cariño.
