Por mucho que estudies, por mucho que aprendas, por mucho que escuches, eso no te ayudará a menos que uses ese conocimiento en las acciones cotidianas.
La mente, los sentidos y el cuerpo se alinean solamente cuando estás en acción. Cuando actúas con buena voluntad, también te alinean con buddhi.
Por lo tanto, la acción es la única manera de lograr la alineación correcta.