En este ensayo se analiza el comportamiento de bancos y cajas durante la burbuja inmobiliaria en España y la posterior crisis.
Los bancos contribuyeron de manera principal a la burbuja ampliando sin control los plazos de amortización de hipotecas para conseguir una cuota mensual muy atractiva.
Cuando estalló la crisis, los bancos cerraron el grifo del crédito, lo que convirtió la recesión en la mayor depresión desde 1929.
El problema actual sigue siendo ellos: les sistema financiero español en su conjunto.